SED de Marie-claire Blais

Renata se está recuperando. 

Durante los tres días y tres noches de celebración donde celebramos el nacimiento de un niño y el fin de un siglo, en esta isla que podría ser Key West, o Jamaica, seres se cruzan, se juntan, luego se vuelven a alejar, como olas que se mueven y se relajan: ricos y pobres, artistas, niños, jóvenes sobre los que se cierne la amenaza del sida, un juez, gente de barco. 

Toda una humanidad que, como Renata, comparte la misma sed: de placer, de borrachera, pero también de justicia.